El aire acondicionado Inverter es aquel que utiliza la tecnología Inverter. Esta tecnología en los aires acondicionados depende del compresor y se caracteriza por su regulación de la velocidad, con el objetivo de que trabaje a velocidad constante y, de esta forma, ofrezca más eficiencia.
Con esta tecnología se regula el mecanismo del aire acondicionado y, en lugar de encenderse y apagarse frecuentemente para obtener la temperatura deseada, el compresor gira de forma continua, lo que hace mantener la temperatura constante en la habitación. Esta acción asegura un gasto energético proporcional al uso y evita consumos innecesarios.
¿Cómo funciona?
El aire acondicionado con tecnología Inverter alcanza la zona de confort programada de forma más rápida. Sin esta tecnología, la estancia estará ante un exceso de calor o frío, ya que no se regula la temperatura. En cambio, con Inverter, la temperatura se mantiene en el grado de calor o frío escogido. Asimismo, la tecnología no-Inverter necesita más tiempo para alcanzar el nivel óptimo mientras que con la tecnología Inverter se llega de forma más rápida. Finalmente, se puede destacar el consumo de energía y el ahorro en la factura dependiendo del uso tecnología Inverter.
Su funcionamiento es:
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- Se indica la temperatura que se desea.
- El sistema enciende el compresor e intenta conseguir la temperatura fijada a una velocidad estable. El sistema Inverter aumenta la velocidad del compresor y se llega antes a la temperatura, aumentando la sensación de confort.
- Regula la velocidad del compresor, generando el 50% de su capacidad para mantener la temperatura. De esta forma, se percibe un ahorro energético y económico.